Las personas LGBT han luchado históricamente contra la violencia, por el reconocimiento de sus derechos y el reconocimiento a su identidad u orientación sexual. En este sentido, no todos los países han avanzado al mismo ritmo en la satisfacción de dichas demandas. En esta ocasión, hablaremos de España y algunas particularidades del territorio nacional con respecto a esta comunidad.
La comunidad LGBT y el trabajo
Si bien las marchas del orgullo se multiplican a nivel internacional, los armarios aún siguen existiendo. Un estudio reciente demuestra que solamente el 38% de las personas LGBT en España se encuentran “fuera del armario” en lo que respecta a sus espacios de trabajo. Quienes participaron del estudio aseguran que la principal razón para la no visibilización de su orientación sexual tiene que ver con querer mantener la vida personal y la laboral separadas. Esto es lo que ha argumentado el 58% de los entrevistados.
Sobre los jóvenes, el 50% de los LGBT han declarado abiertamente su orientación sexual en la vida privada. No obstante, el estudio, realizado por el Banco Santander en colaboración con AZA, Grand, Nationale-Nederlanden, Telefónica y el Centro de Diversidad del IE, sostiene que la mitad de ellos retornan al armario en sus trabajos, sintiéndose más discriminados en este ambiente. Con respecto a la identidad de género, las lesbianas manifestaron un nivel parecido de aceptación al de los hombres gais en el ámbito privado, pero sintiéndose más invisibilizadas en los círculos profesionales y laborales. En el caso de las lesbianas, si bien el 60% declara haber “salido del armario” en su vida privada, solamente el 35% declara haber podido hacerlo en el lugar de trabajo.
Con respecto a las personas trans, el 90% de los entrevistados afirmaron que a este colectivo se encuentra en una situación especial de desigualdad de oportunidades laborales en España. Las propias personas trans encuestadas manifestaron miedo a un cambio en su valoración como profesionales, miedo a ser rechazadas y miedo a ser despedidas en caso de visibilizarse con su identidad en el ámbito laboral.
Ley para personas trans
El debate en España de una Ley para personas trans lleva mucho tiempo. Si bien es cierto que la actual Ley 3/2007 supone una respuesta legislativa al cambio de la inscripción relativa al sexo de una persona en el Registro Civil, no contempla la realidad de las personas trans de manera integral. Partiendo de ese punto, el anteproyecto de ley trans asume nuevos aspectos que era, hasta ahora, inéditos, sobre el colectivo trans. No solamente se habla de la libre autodeterminación de la identidad, sino también de la despatologización de la transexualidad. Esto es algo que el país aún debe conquistar y que constituye una deuda con las personas trans de España y su situación de especial vulnerabilidad.
En lo que respecta a los meses de aislamiento por la actual pandemia del coronavirus, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB) ha informado que las personas trans realizaron más del triple de llamados a la Línea Arcoíris que comparando con el mismo período del año 2019. Esta línea es un servicio de atención telefónica que la Federación pone a disposición de la población LGBT. Entre el 16 de marzo y el 29 de mayo del corriente año, se atendieron 119 consultas, mientras que en 2019, en el mismo período, la cifra fue de 34.
Explica la FELGTB que:
“En este mismo periodo de tiempo, también se incrementaron de manera notable las consultas del conjunto de la población LGTBI, con un aumento del 136%. Aumentaron, especialmente, las llamadas para preguntar sobre el acceso a recursos de ayuda y/o prestaciones (pasaron de 103 a 284), las demandas de atención psicológica, que se multiplicaron por 5 (pasaron de 18 a 92) y la necesidad de asesoramiento jurídico, que se duplicó (de 20 a 46).”
Los casos de Navarra, Comunidad Valenciana y Aragón
Los diferentes territorios nacionales tienen, también, distintas situaciones y oportunidades para la comunidad LGBT, tanto en España como en otros países del mundo. Habitualmente, las capitales tienden a ser más tolerantes con esta población que los pueblos pequeños. En septiembre, la FELGTB presentó un informe que compara las medidas recogidas por diferentes legislaciones autonómicas para la garantía de los derechos humanos de la infancia y la juventud trans en el entorno educativo.
En este estudio, se arrojó que Navarra, Comunidad Valenciana y Aragón son las comunidades que tienen mejores medidas para la garantía de los derechos de la infancia y de la juventud trans en las aulas de las instituciones educativas. Los espacios en los que los menores trans no tienen protección alguna, según el estudio, son: Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, La Rioja, Principado de Asturias y Ceuta y Melilla. Esto último se debe a que no existe legislación a nivel estatal, pero tampoco legislación autonómica que los ampare. Explica Ferrándiz, coordinador de educación de la FELGTB, que:
“Esta investigación no analiza el grado de implementación de las medidas sino su vigencia, de hecho, tras Navarra, Comunidad Valenciana y Aragón, otras comunidades como Madrid y Murcia, tienen una legislación más completa, pero es de sobra conocido el intento de imponer el veto parental en los centros educativos que vulnera los derechos básicos del alumnado LGTBI.”
Visibilidad bisexual
El 23 de septiembre se celebró el Día Internacional de la Bisexualidad. Con motivo de esa ocasión, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB) ha hecho un llamado a reivindicar especialmente a las personas bisexuales, brindando más visibilidad, reconocimiento y normalización. Ello, debido a que se trata de una orientación sexual que, según sostienen, se encuentra permanentemente cuestionada y con poco conocimiento a nivel social. Personas bisexuales que formaron parte de esta iniciativa aseguran vivir en constante necesidad de reivindicar quiénes son y con comentarios permanentes que niegan su identidad.